‘Almost human’ es uno de los productos discográficos del año en Canarias. Un trabajo de rock electrónico intenso y que suena de forma espectacular. No es de extrañar que sus autores, es decir, Noiseed sean además un valor en alza. Hace bien poco que conocíamos la esperanzadora noticia de que el dúo formado por Sergio y Omar ha sido seleccionado por el circuito nacional AIEnruta, que auspicia económicamente, echando una más que aceptable mano, a algunos de los proyectos en directo más interesantes de cuantos circulan por los escenarios del Estado. Así que nos viene como anillo al dedo rescatar este jugoso trabajo.
Que este ‘Almost Human’ sea un disco de música electrónica no tiene por qué sorprender a nadie, pero que guste además a quienes escuchan habitualmente otro tipo de géneros, sí que es una cuestión a tener en cuenta.
Secuencias de infarto y arreglos sesudos, en un torrente energía contenida de cinco temas que despiertan la conciencia y que con dosis bien calculadas de violencia y oscuridad llegan de forma salvaje, pero siempre en su justa medida, a nuestro cerebro
.Almost Human by Noiseed
¿Bailas? Claro, está sonando Noiseed y ese punto mágico de diversión no nos lo quita nadie. Por ello desde su ‘C.I.S, Collective Intellectual Suicide’, nos lo dejan bien clarito. Vamos a mover el esqueleto,
También con cierto aire gótico, pero sin pasarse, ya saben - en dosis adecuadas -, este ‘Almost Human’ transcurre de forma incómoda, pero rezumando una apabullante serenidad. Y les cuento esto porque el disco guarda un par de buenos hits escondidos ‘Blood Pump’ y ‘Action/Reaction’, que le dan una estabilidad más que necesaria al producto.
‘Double edged pleasure’ y ‘A place in the sun’ cierran con nota un trabajo inteligente y goloso, un disco con el que tendrán que medir sus próximos pasos y créanme, no parece una tarea sencilla.
Bajo el sello de El Hombre Bala Records, con una inquietante portada y el masterizado final de Dani ‘Tupper’ García, Noiseed otorga además un envoltorio visual y sonoro que poco o nada tiene que envidiar a producciones internacionales. Ahora solo hay que escucharlo y sacar sus propias conclusiones.