"Desarrollo desde hace unos años la temática de la naturaleza a partir de sus elementos básicos tradicionales, tierra, agua, aire y fuego, y su relación con el ser humano. Me intereso mucho por los seres diminutos en su dimensión material y espiritual a partir de la experiencia vivida tras la pandemia del Covid”, detalla el escultor grancanario.

Entre estos seres elementales, Díaz distingue dos realidades diferentes. Por una parte, se encuentran los microorganismos que en el mundo natural participan en diversos procesos metabólicos, ecológicos y biotecnológicos y constituyen “un factor clave para el funcionamiento de los sistemas biológicos y el mantenimiento de la vida en la tierra”.

Por otra parte, en el mundo espiritual, los seres elementales son una categoría de seres mitológicos. Se trata de los genios de la naturaleza, correspondientes en una dimensión distinta a la material donde viven los humanos. Estos otros seres de dimensión espiritual tienen su correspondencia con los elementos de la naturaleza: gnomos, duendes, hadas y gremlins pertenecen a la tierra; ondinas, nereidas, ninfas, sirenas y tritones, al agua; sílfides, silfos y elfos, al aire, y salamandras, dragones y fénix, al fuego.

Las piezas que constituyen la propuesta de Díaz son fragmentos descontextualizados de estos seres elementales; mediante un proceso de abstracción, se crea un contexto en el que se yuxtaponen realidad y fantasía en un proceso de imitación interrelacionado. “Con estos parámetros, con una libertad escultórica en cuanto al uso de técnicas, formas, colores y materiales, con un lenguaje estético propio, con un tratamiento irónico e incluso con sentido del humor, condenso un proceso de creación mediante el cual se van a definir las bondades y la creatividad de la obra final, que es el fruto de mi pensamiento crítico”, concluye el escultor.

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Nacido en 1959 en Las Palmas de Gran Canaria, entre las exposiciones en las que ha participado Domingo Díaz destacan seis individuales: 'Otros límites' (San Antonio Abad, 1992); 'Charcal', (La Palmita. Campus Universitario de la ULPGC, 1994); 'Espacio vital' (sala de La Caja de Canarias, La Laguna, 1995); 'Espacios fluidos' (galería Artificios, Las Palmas, 2004); 'El fuego' (Centro de Artes plásticas, Las Palmas, 2024), y 'Recorrido', (sala de arte Agüimes, 2024).

Cuenta con distintas obras instaladas en espacios públicos: 'Circulo vital', en el parque de La Palmita (Agaete); 'Homenaje a Miro Mainou', en el parque de Las Flores (Agaete); 'Taragua', en la plaza de León y Joven (Telde); 'Pietdrian' y 'Trayectorias', ambas, en los Jardines del Pensador (Zona universitaria de Tafira). Desde que comenzó a exponer, en 1987, y hasta 2024 se contabiliza su participación en 32 exposiciones colectivas.

Espacio Bronzo

El Espacio Bronzo es un centro de referencia del arte escultórico en Tenerife: la sala da cabida también al trabajo artístico basado en instalaciones, la joyería y la artesanía. Sala de arte y tienda, es una iniciativa del taller de fundición Esculturas Bronzo, concebida como un espacio de actividad cultural dedicado a la escultura, el diseño y la joyería. La sala lagunera cumplió 12 años a finales de 2024 y se ha convertido en un punto de encuentro en el que se unen el público y los artistas plásticos que residen o trabajan en las Islas.

En paralelo a la sala, Bronzo muestra al público los objetos singulares que el taller de fundición artística elabora al aplicar la técnica escultórica no solo a piezas de arte, sino también a piezas de diseño o funcionales que lleguen a todo el público. Con este planteamiento, Bronzo presenta tanto esculturas de autor, de los muchos escultores con los que trabajan habitualmente, como series de producción limitada diseñada y elaborada por los escultores del taller. Esculturas Bronzo está formado por Francisco de Armas, Evelina Martín y Ventura Alemán, licenciados en Bellas Artes por la Universidad de La Laguna.