La Sinfónica de Tenerife ofrecerá en su nuevo programa de temporada una mirada hacia el siglo XIX a través de obras seleccionadas de Chopin y Sibelius, compositores fundamentales de la era romántica y el nacionalismo musical. El director honorario de la orquesta, Víctor Pablo Pérez, conducirá el concierto que tendrá lugar este viernes 28 de mayo a las 19:30 en el Auditorio de Tenerife e incluye el debut con la formación del pianista polaco Rafał Blechacz.

Hablar de Frédéric Chopin (1810-1849) es hablar del primer poeta del piano y de una de las figuras más atractivas del romanticismo musical. Su obra, en su mayoría destinada a este instrumento, goza de una gran consideración por su lirismo, pureza, delicado encanto y virtuosismo. El Concierto para piano y orquesta n.º 1 en Mi menor –que en realidad es el segundo cronológicamente– pertenece al periodo polaco del compositor, antes de hacer de París su hogar. Estrenado en 1830 en Varsovia, fue de hecho el último concierto de Chopin en su país y escrito, como el segundo, para lanzar su carrera como virtuoso, siendo su resultado, sin duda, la obra de un genio con una voz única.

Finlandia no tenía una tradición musical de importancia antes de Jean Sibelius (1865-1957). Sus primeras obras, impregnadas de fervor nacionalista, fueron de estilo romántico tardío. Su Sinfonía n.º 2 en Re mayor, que ocupa la segunda parte de este programa de la Sinfónica de Tenerife, cierra un periodo muy creativo y fecundo denominado'romanticismo nacionalista', al que rechazó en partituras posteriores. Se trata de la sinfonía más universalmente conocida de las siete que escribió, compuesta después de Finlandia, y que, según los críticos, lleva “una significativa carga política”. Al concluirla en 1902, fue asumida por los finlandeses como un canto de combate y liberación contra el opresor ruso y la expresión musical de sus aspiraciones nacionalistas.

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El director honorario de Sinfónica de Tenerife, Víctor Pablo Pérez, realiza sus estudios en el Real Conservatorio de Música de Madrid y en la Hochschule für Musik de Múnich. Entre 1980 y 1988 fue director artístico y titular de la Sinfónica de Asturias y entre 1986 y 2005 de la Sinfónica de Tenerife. En 1993 toma las riendas de la Sinfónica de Galicia, labor que lleva a cabo hasta 2013, año en el que se incorpora como director artístico y titular a la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid. Desde enero de 2017 es el director artístico de la Joven Orquesta de Canarias.

Numerosos galardones y reconocimientos de la crítica especializada, productores y artistas distinguen a Rafał Blechacz como uno de los mejores intérpretes de las obras para piano de Chopin de su generación. Comenzó a tocar a la edad de cinco años y completó sus estudios de piano en 2007 en la Academia de Música de Bydgoszcz, con la profesora Katarzyna Popowa-Zydroń. Un año antes, en 2006, firmó un contrato exclusivo con la compañía discográfica alemana Deustche Grammophon, convirtiéndose en el segundo pianista polaco, después de Krystian Zimerman, que ha firmado con el sello.