Alex Roca y Mari Carme Maza compartieron su inspiradora historia en una conferencia, en el marco de la XXXI edición de los cursos de la Universidad de Verano de Adeje, denominada 'El límite te lo pones tú', destacando la importancia del esfuerzo y el apoyo en la vida. Ambos recordaron cómo, a través de la perseverancia y el apoyo de sus seres queridos, lograron superar numerosos obstáculos y alcanzar sus metas.
Nada más iniciar la ponencia, Alex Roca recordó su infancia, donde se enfrentó a dos mundos: uno seguro y protegido en casa así como en la escuela, y otro hostil y difícil en la calle, donde era objeto de críticas por su cuerpo. Sin embargo, gracias a la constante afirmación de sus padres sobre su valía, logró empoderarse y transformar las críticas en una fuerza positiva, "mis padres me decían que yo era guapo y me lo dijeron tantas veces, que me lo creí".
Roca enfatizó la importancia de la salud mental y su experiencia con la terapia psicológica. Desde joven, una psicóloga le recomendó utilizar un saco de boxeo para liberar su rabia y frustración, ya que no podía expresarse verbalmente. Este consejo marcó el inicio de su relación con el deporte, que le proporcionó una sensación de libertad y bienestar.
Los valores de respeto, trabajo en equipo y humildad inculcados por sus padres fueron esenciales en su desarrollo. Alex Roca atribuye su éxito a la lucha incansable de sus padres y su actitud positiva frente a la adversidad. Su abuelo, en particular, jugó un papel crucial, creyendo firmemente en su capacidad para caminar y alcanzar otras metas significativas, como obtener su licencia de conducir después de múltiples intentos.
"Soy el resultado de la lucha de mis padres cuando yo no podía hacer muchas cosas y de su actitud ante el mundo, cuando nadie confiaba en mí, le debo todo a mi familia", así reflejaba Roca la importancia de tener referentes en la vida. Aprender lengua de signos también fue un hito importante, permitiéndole comunicarse mejor con sus seres queridos y amigos.
A pesar de los comentarios desalentadores que recibió durante su crecimiento, Roca aprendió a valorar lo que tenía y a aprovechar al máximo cada oportunidad. El deporte fue una herramienta clave para conectar con otras personas y superar sus dificultades. Ha participado en más de 70 carreras y seis triatlones, demostrando que con esfuerzo y determinación, todo es posible.
Roca compartió una valiosa lección sobre el fracaso y el éxito: "Cuando crees que fracasas pero lo sumas como aprendizaje, se transforma en éxito. No hay más éxito en la vida que intentarlo, aunque falles. Aprendí que no podemos ir tan rápido, tenemos que ir a un ritmo que nos permita llegar a la meta, a veces menos es más. Lo más importante en la vida es tomarse las cosas con alegría, con humor y simplificar".
Alex enfatizó la importancia de la ambición y la persistencia: "la ambición es importante, el querer que las cosas sucedan es importante y para eso hay que luchar. Si te caes, te tienes que levantar y seguir". Además, destacó que nadie puede avanzar en soledad y que es crucial rodearse de un buen equipo que te acepte tal como eres.
La ponencia concluyó agradeciendo a la vida por las oportunidades que ha tenido: "yo solo sé correr, no salvo vidas, pero soy capaz de visibilizar una realidad que existe, porque existimos, aquí estamos. Doy gracias a la vida por la suerte que he tenido, por haberme permitido correr en diferentes partes de España y de otros países del mundo".
Su historia es un testimonio del poder del esfuerzo, el apoyo y la perseverancia, inspirando a todas las personas a seguir adelante a pesar de las adversidades.
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