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“El urbanismo nos ha quitado la idea de vivir la ciudad”

El Festival Sitio. Artes en el espacio privado llega a la capital tinerfeña con un objetivo claro: desarmar la idea clásica del museo como contenedor de arte. De una manera revolucionaria, este proyecto cambiará la manera de presentar la cultura a la ciudadanía, integrándose en el espacio personal, de manera que se establezca una relación más abierta entre los artistas, las creaciones y el público. Para hacer compatible la conexión entre el hecho artístico y el devenir de la calle, una veintena de acciones se llevarán a cabo en diferentes espacios privados de la ciudad entre el 16 y el 19 de octubre con la implicación de creadores tanto internacionales como nacionales o locales.

“El urbanismo nos ayuda a orientarnos pero nos ha quitado la idea de vivir la ciudad”. Quien así se expresa es Lola Barrena (Santa Cruz de Tenerife, 1977), directora-coordinadora del Festival Sitio, que estos días se afana para dejar bien atados los últimos flecos antes de la inauguración –el jueves 16 a las 18:00 horas en el espacio privado Solar San Lucas, 25– de una iniciativa que nace con un objetivo claro: “Que la ciudadanía fuera parte activa de la cultura de su entorno, que no solamente acuda como sujeto pasivo a ver qué hay hoy sino que fuera parte activa” y lo hace aportando “sus recursos”.

“Lo que ocurre en el museo, en las instituciones en general, no solamente públicas sino hechos ex profeso para el arte o la cultura, es que casi uno tiene que despojarse de quién es para entrar a ver una exposición o una muestra de artes escénicas, algo que supuestamente te va a dar la clave de tu vida”. De sus palabras se adivina el pasado de Lola Barrena como comisaria de exposiciones en TEA Tenerife Espacio de las Artes, experiencia de la que aprendió a leer la vida en clave ciudadana. “Las instituciones, para manifestaciones culturales de este tipo, gastan muchísimo dinero en la infraestructura, muchísimo dinero en la producción, y luego la rentabilidad social es prácticamente nula. Todo eso hace que me pareciera que se estaba gastando demasiado dinero en algo que no tiene ninguna repercusión cultural”, añade.

Esto no quiere decir que Barrena, historiadora del arte, defienda el desarrollo de la creación cultural fuera del ámbito público. En una dinámica y docta conversación, asegura que “la administración no puede ser suplida por lo privado y es responsable de la cultura” de una sociedad. El Festival Sitio, como iniciativa del Organismo Autónomo de Cultura del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife es “cultura pública”. Por esta razón, explica la directora, todas las actividades son de carácter gratuito al estar ya “pagadas con unos impuestos”.

Sin embargo, advierte que “la cultura también puede estar en manos de la ciudadanía y esta no tiene por qué dedicarse a la cultura, sino que la puede generar de otras maneras utilizando sus recursos”. Ejemplo de ello es Espacios privados, una de las convocatorias con las que ha contado el proyecto y en la que propietarios de inmuebles en el casco urbano de Santa Cruz han puesto a disposición de los artistas sus bienes en desuso (una azotea, locales vacíos, entradas a viviendas, balcones, almacenes y solares).

Esta es también la filosofía de Solar, un espacio privado brindado a la cultura pública gestionado por la Acción Cultural. Sociedad-Lugar-Arte. “Realmente la idea del festival es Solar en grande”, comenta sonriendo Lola Barrena, gestante de la idea e impulsora de Solar, quien defiende que deben generarse relaciones más fluidas entre el sector público y el privado para lograr el bienestar del ciudadano, con lo que el papel que juega el Festival Sitio en ello es el de hilo conductor o intermediario entre las dos partes. En este sentido, “el ciudadano es activo y el Ayuntamiento lo que hace es prestar sus recursos” necesarios llevar a cabo el proyecto. Eso sí, advierte con humor: “Esto no es como las procesiones, como no vienes a la iglesia, te saco el santo a la calle”.

Festival Sitio no solo propiciará otros espacios para el juego social y relaciones entre lo público y lo privado, sino que también facilitará nuevas formas de pensamiento. En una contagiosa mezcla de entusiasmo e incertidumbre, su directora-coordinadora desvela que este proyecto en realidad es una manera de implantar en Santa Cruz el “espacio social”, con el objeto de introducir bienestar, innovación, conocimiento, salud y cohesión social en el urbanismo. “La ciudad empieza a ser vivida, no transitada”. Su inspiración es el prólogo que hace Emilio Martínez, uno de los participantes invitados, a 'La producción del espacio' de Heri Lefebvre.

Por ello, este proyecto no solo funciona como punto de irradiación de convergencias sociales, en él también se le da importancia “a las ideas y a la gente que tiene esas ideas”. Este es el caso de la la denominada Fisuras, coordinada por Dalia de la Rosa que reúne a estudiantes de Historia del arte con creadores de trayectoria consolidada con el objeto de que “haya una sinergia” entre el desarrollo plástico de nuevos artistas y las herramientas teóricas de nuevos comisarios y gestores.

En este nuevo enfoque de acercamiento del arte al público, las artes en movimiento tienen un papel destacado. Los Artistas del movimiento, a cargo de Masu Fajardo y Javier Cuevas, presentará a creadores cuyo trabajo pueda realizarse en lugares poco habituales para este tipo de piezas como los que se plantean en el Festival Sitio. Es precisamente esta disciplina artística la más adecuada para pensar nuevos espacios, al estilo de la línea de trabajo de grandes museos contemporáneos, a pesar de que Barrena, haciendo ejercicio de autocrítica, opina que esta primera edición “quizás ha descompensado la balanza hacia las artes en movimiento en lo que a cantidad se refiere”.

Un empeño o condición de Lola Barrena para poder desarrollar el Festival Sitio, y que el Ayuntamiento ha entendido a la perfección, es que “todo el mundo cobra dignamente su trabajo simbólico o intelectual, algo que no suele ocurrir” en el ámbito público. Gracias a ello nombres como Juan Domínguez, Juana Fortuny, Élida Dorta, Quim Bigas, David Perreko, Rubens Askenar, el cuarteto Ancora, Gichi Gichi Do, Vicent Bru, Raquel Ponce, Ira Lombardía, Rafael Pinillos, Carmen Macías o Dea Woon Kang, entre otros, descubrirán sus nuevas ideas a través de procedimientos como la música, la danza, una instalación, videoproyecciones, exposiciones, conversaciones y hasta de un encuentro teórico ('Intersticio') en lugares como un solar, la sede de una asociación de vecinos o el estudio de un artista.