Tener a Rogelio Botanz al lado y que te cuente parte de su vida y de su trayectoria es un privilegio enormemente edificante. No solo porque sabe de lo que habla y sabe cómo contarlo, el cantautor, intelectual y maestro de escuela, narra con la emoción que solo alguien con auténtica pasión por su trabajo puede transmitir.
Este año Rogelio será galardonado con el premio que otorga el Festival MUMES. Con esta excusa y ante su inminente concierto de mañana jueves, decidimos quedar con él y felicitarlo en persona. "¡Felicidades por el premio!"
Rogelio Botanz.- Pues muy contento y halagado por recibirlo, y orgulloso además de que el Festival MUMES me haya metido en el mismo saco que a otros de sus ilustres premiados. Antonio Lozano, en cuya casa casi que nos conocimos mi mujer y yo, un enorme literato y amigo. Los Hermanos Thioune, el periodista Juan Manuel Pardellas quien definió como disco del año aquel trabajo que editamos Taller tras la partida de Pedro Guerra, también el amigo y profesor Amadou Ndoye que es capaz de recitar a María Rosa Alonso... gente que tiene muchísimo mérito.
Lagenda.- ¿Llega este premio en un buen momento?
R.B.- Por supuesto, estoy muy ilusionado. En algún momento, hace años, tuve una intuición. Viendo un vídeo de Compay Segundo en televisión me sentí identificado y pensé en lo que pensaría la gente si viera a Rogelio Botanz anciano sobre un escenario y con sus chácaras. Estoy casi en la tercera edad pero no me veo así. Un día te miras al espejo y no conoces al tipo que ves reflejado. Yo sigo viendo en el espejo al chiquillo curioso. La sociedad se rinde ante la simpatía de un viejo persistente.
Un día te miras al espejo y no conoces al tipo que ves reflejado. Yo sigo viendo en el espejo al chiquillo curioso.
Lagenda.- Además de tu fuerte vinculación con las islas y tu lucha por la tolerancia y el reconocimiento de las identidades culturales de los pueblos, razones por la que te han dado este premio, tendrás mil motivos para estar orgulloso de tu trayectoria.
R.B.- Claro, mis días con Andrés Molina y Pedro Guerra, el Taller Canario de la Canción, mi batería tradicional, mi gofio rock. El hecho de fabricar mi propia percusión para ese proyecto y dar con los timbres adecuados a través de tambores canarios o hacer de la nueva trova canaria un estilo más propio del siglo XXI... son muchos motivos. Con Taller llegamos a redactar una ponencia sobre los rasgos que debería de tener este estilo y parte de esta fue censurada. Canarias tenía que estar presente en las letras, y cualquiera que acuda a un concierto debe volver a casa sabiendo que ha escuchado una propuesta de las islas, de la misma forma que cuando escuchas a Jorge Drexler sabes que el cantautor evoca a Uruguay. Pues fíjate, fue ese mismo rasgo de identidad el que fue eliminado de la ponencia porque podía parecer muy radical. Yo soy muy espartano y racional. Nuestra toponimia se habla a 80 kilómetros de aquí, si no nos hubieran arrancado nuestra lengua hablaríamos en esa especie de 'amazig fósil', que en mis conciertos descongelo, sacando a pasear al mamut que se esconde dentro. Podría ser el caso del cantautor Kino Ait Idrissen y su bereber rifeño. Cuando entra en escena con su mandola es una maravilla. Llevo mis conciertos a Agadir o Marsella y ves cómo la gente presta mucha atención al lenguage, a los tambores.
Lagenda.- Tus conciertos suelen tener un punto extra de actitud del que todavía muchas formaciones podrían aprender. ¿Concibes cada concierto como un espectáculo?¿Tienes preparado algo especial para esta cita con el público en Santa Cruz?
R.B.- La banda es parte de ese concepto. La ayuda de Alfredo Llanos a la batería, quien también me echó una buena mano durante mi época del Taller, de Alberto Méndez 'Naranjita' al bajo que está en perfecta sintonía con mi proyecto. La gran guitarra de Gonzalo de Araoz y la presencia en esta ocasión de Julio Tejera, un músico formidable que te devuelve todo en música y cuyo talento ofrece otra dimensión a mis canciones. Hay altura y concepto. Desafortunadamente para esta ocasión no podré contar con el violinista Ismel, aunque sí que tenemos nuevos percuteros, más otros en los que la línea de búsqueda es la misma, aunque los hallazgos son diferentes.
La búsqueda es la misma, aunque los hallazgos son diferentes.
Como maestro de escuela me gusta que hasta el último de la fila pase delante y se lleve un buen recuerdo del concierto. Me encanta la sensación que produce el espectáculo en vivo, la sintonía que hay con el público, muy parecida a la complicidad que aporta el teatro. Me gustaría incorporar proyecciones que fueran tan reales como mis canciones. Mis directos son como la radioactividad. El corazón del público es como la placa fotográfica y la radiación son mis historias, mis canciones.
Normalmente por estas fechas suelo estar de viaje y voy a ver a mis padres. En esta ocasión serán ellos quienes estén por aquí. Tengo previsto incluir a mi padre en el espectáculo y cantar con él alguna canción de las que aprendí en mi niñez..., una habanera, una ranchera, un tango..., yo nací de un tango. ¿Cuánta gente habrá nacido de un tango? Por otro lado sigo imprimiendo en mis conciertos la energía del rock porque también soy hijo del rock and roll.
... yo nací de un tango. ¿Cuánta gente habrá nacido de un tango?
Lagenda.- En cuanto a tus derivaciones hacia la política, ¿te han acercado más a los problemas de la cultura musical en Canarias?¿Crees que existe el apoyo necesario?¿Piensas que hay futuro para el folclore?
R.B.- Mira, estoy cansado del mundo de las lamentaciones. Los aficionados a la caza en Tenerife no son subvencionados para que vayan a cazar a Fuerteventura. Prefiero centrarme en lo que los intelectuales debemos hacer. No quiero ser parte de las plañideras de la cultura. Hay motivos para la denuncia... dinero invertido en sociedades anónimas, en el fútbol, mientras se subvenciona el kilo de músico canario para viajar. Hagamos los creadores nuestro oficio y dejemos la investigación y la denuncia a los periodistas. Yo no doy abasto y no me siento autorizado para enjuiciar.
El folclore tiene un gran problema. Las agrupaciones folclóricas llevan haciendo el mismo repertorio desde hace cuarenta años. Eso lo nota la gente. Cuando creamos con criterio, el público viene a escuchar. Salvo el caso del timple, que ha impulsado y evolucionado incluso al sector de los fabricantes de este instrumento, el resto parece haberse estancado en los ochenta. En su momento funcionaban Tenderete y La Luchada, ahora tenemos lo que tenemos en la Televisión Canaria.
Las agrupaciones folclóricas llevan haciendo el mismo repertorio desde hace cuarenta años
Lagenda.- Muchos te consideramos un pionero en nuestra música mestiza, pero no hay muchos ejemplos que hayan seguido el mismo camino que Rogelio para seguir esta evolución de la música de raíz.
Hay una razón política para esto. Creo que si materialicé esta propuesta es porque soy vasco. Mi oferta musical depende de la importancia que yo les doy a los instrumentos tradicionales, al lenguaje, al silbo, a las formaciones canarias primigenias... Desde mi óptica me he quedado con lo que los canarios tienen y con lo que podrían afirmar su identidad. Por distintas razones hay canarios que no le dan importancia al hecho de afirmarse. Quizá porque ya son canarios, o porque el canario lleva dos mil años enfrentándose a depredadores y perdiendo. Desde que sabemos, primero en la época del imperio romano, luego normandos, castellanos o defendiéndose de Nelson. El canario también tiene miedo a Hassan y por otra parte 'vosotrea' cada vez más, desprendiéndose de lo que lo identifica. Ocurría con Michael Jackson, lo suyo era una enfermedad.
Sí que he visto propuestas que significativamente aluden a mi fusión, o a mi género. Acuden a mis arreglos o a parte de este concepto pero nunca oficialmente.
Estuvimos un rato más hablando del 'pedroguerrismo', o de que hasta Melendi se agitana cuando canta o de que la rumbita canaria es un despropósito. Pero nos quedamos con lo que nos ha contado, que ya de por sí tiene bastante enjundia y los emplazamos a su concierto de hoy (jueves 23 de julio) donde podrán ver sobre el escenario del Espacio Cultural CajaCanarias a uno de los grandes artistas de nuestra y de otras tierras del planeta http://www.lagenda.org/programacion/rogelio-botanz-espacio-cultural-caja...
La foto de portada (Shot by Lagenda) es un guiño de Rogelio Botanz a sus compañeros del Taller que sí nacieron en el 63.
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