Granadilla de Abona, municipio que alberga a más de 120 nacionalidades, se convertirá en sede nacional de la Cumbre Juvenil Antirrumores, del 18 al 21 de septiembre, en su VIII edición. El encuentro, en el que participarán jóvenes de 10 ciudades españolas, supone la puesta en valor de la diversidad cultural como fuente de riqueza social de la mano de la juventud.

La iniciativa, organizada por Diversit-Antirumours Global, con la colaboración del Ayuntamiento, a través de las Concejalía de Juventud y Participación Ciudadana, se enmarca en el marco estratégico 'Tenerife vive Diversidad', que cuenta con el acompañamiento de Juntas En la misma dirección, estrategia para la convivencia intercultural impulsada por el Cabildo de Tenerife y la Universidad de La Laguna.

La alcaldesa, Jennifer Miranda, explica que esta cumbre está destinada a fortalecer el papel de la juventud en el abordaje de estereotipos, prejuicios y rumores relacionados con la diversidad; “damos un paso más para avanzar en nuestro compromiso con la convivencia intercultural y la participación juvenil, convirtiéndonos en anfitriones de este evento que atraerá a jóvenes de diversas procedencias para conectar con la juventud del propio municipio, que tendrá un protagonismo destacado durante esta edición”.

Por su parte, Celia Navil Trujillo Cano señala que se trata de una actividad gratuita para jóvenes de 14 a 21 años que tiene como objetivos profundizar en sus conocimientos, desarrollar habilidades y aprender nuevas metodologías que fomenten el espíritu crítico. Agrega que será un espacio de convivencia orientado a compartir experiencias y buenas prácticas con otras personas vinculadas a las diferentes estrategias antirrumores existentes en el país.

La Cumbre Juvenil Antirrumores es una actividad anual itinerante, que ya se ha celebrado en ciudades como Sabadell, Pamplona, Getxo o Manlleu. La estrategia antirrumores es una iniciativa de colaboración entre administraciones y sociedad civil, orientada a reducir estereotipos, prejuicios y rumores que fomentan la discriminación, la xenofobia y el racismo. Desarrollada inicialmente en Barcelona en el año 2010, como parte del Plan intercultural promovido por su Consistorio, su enfoque se ha extendido a escala global, adaptándose a diversos contextos culturales y sociales.